Como con cualquier dispositivo electrónico, el agua es el enemigo. A menos que esté diseñada específicamente para su uso bajo el agua, su cámara digital es vulnerable a los daños causados por la lluvia y la niebla. Pero no canceles esa sesión de fotos sólo porque esté lloviendo. Con estas estrategias, puedes conseguir esas fotos independientemente del tiempo que haga.
Proteja su equipo
La prioridad número uno es proteger su equipo de la lluvia, la humedad y la condensación.
- Lleve siempre consigo algunos paños secos para la cámara. Los paños de microfibra que pueden limpiar todas las partes de la cámara, incluidos el objetivo y la pantalla LCD, son una gran elección. Guárdelos en una bolsa de plástico cerrada cuando no los utilice para mantenerlos secos.
- Nunca utilice su ropa para secar o limpiar el objetivo de la cámara. Utilizar cualquier cosa que no sean los paños de limpieza de la cámara puede rayar los delicados objetivos, la pantalla LCD y el visor de la cámara. Además, las fibras de la ropa pueden adherirse a los objetivos.
- Tenga a mano algunas toallas. Colóquelas sobre la cámara entre las tomas para proporcionar una protección adicional.
- Utilice una bolsa para cámaras para todo tipo de clima. Esto ayudará a mantener la cámara seca y protegida cuando no la estés utilizando.
- No confíe en un paraguas para mantener su equipo seco. Sostener un paraguas mientras se intenta hacer fotos es imposible. Además, un paraguas no evitará que la lluvia pase por debajo de él y empape la cámara.
- Dispara desde un tejado que sobresalga o cualquier otro refugio. Puede que no consigas todas las fotos que quieres, pero tú y tu equipo permaneceréis secos. Sin embargo, también en este caso el viento puede anular tus esfuerzos, así que prueba este método sólo en un día tranquilo.
- Utilice un parasol para el objetivo, una chaqueta para la cámara o una bolsa de plástico. Recuerda que el objetivo es mantener el equipo seco sin impedir la visibilidad del objetivo.
- Mete en la bolsa de la cámara unos cuantos paquetes de gel de sílice que absorben la humedad. Ayudan a evitar la condensación y aceleran el proceso de secado.
Mantente cómodo
Si tienes frío, estás mojado y te sientes mal, no querrás quedarte para hacer las fotos creativas y con mal humor que permiten las condiciones de lluvia.
- Lleva ropa de abrigo para todo tipo de clima. Tu cámara está seca dentro de su bolsa, y tú deberías estar seco dentro de tu chaqueta. Como mínimo, lleva un chubasquero siempre que hagas fotos en exteriores. Así no perderás oportunidades fotográficas sólo porque el tiempo cambie. También puedes meter tu equipo dentro de la chaqueta en caso de necesidad.
- No olvides los guantes. La humedad suele ser sinónimo de frío, y si tus manos están temblorosas o rígidas, la calidad de tus fotos se verá afectada.
Adaptarse a las condiciones
El tiempo lúgubre y lluvioso requiere algunos ajustes:
- Utilice una velocidad de obturación lenta. Hay mucha menos luz disponible en los días nublados y lluviosos.
- Utilice un trípode. La velocidad de obturación lenta hace que sea crucial mantenerse quieto, y nada lo hace mejor que un trípode.
- Busca la luz. La luz reflejada, la luz de los edificios y de los escaparates, un paréntesis en las nubes… todo ello puede ofrecer oportunidades para hacer fotos realmente interesantes.