Para los que vivimos en el Reino Unido, la Nochevieja suele ser una velada exagerada en una discoteca o en un bar abarrotado, dando tumbos para tratar de mantener las bebidas a un precio excesivo entre los transeúntes que se balancean. Si esto no es lo tuyo (¡y tampoco lo mío!), entonces estarás rezando para que alguien tenga una fiesta en casa medianamente decente: nadie quiere estar con Jools Holland y su Hootenanny… Después de la Nochevieja habrá una serie de promesas incumplidas, abonos al gimnasio poco utilizados y dietas de moda. Por suerte, parece que el resto del mundo tiene otras ideas:
Brasil
En Río de Janeiro, las sacerdotisas del culto vudú de Macumba llevan a cabo una ceremonia en Nochevieja dedicada a la diosa del agua, Yemanja. Una barca de sacrificio cargada de velas, flores y joyas es empujada al mar desde la playa de Ipanema. Al día siguiente, se comparten platos a base de lentejas en los hogares de todo el país, debido a la creencia en Brasil de que la lenteja significa riqueza. Feliz Ano Novo, Brasil!
Japón
Japón, famoso por su cultura única y su insuperable pasión por la tecnología, tiene una gran tradición de celebración del Año Nuevo, similar a la de China (aunque la de Japón tiene lugar la misma noche que nuestro Año Nuevo gregoriano).
Las celebraciones en Japón comienzan tradicionalmente hasta una semana antes de la gran noche, con rutinas como la limpieza de la casa y el pago de las deudas. La misma noche, una campana suena 108 veces, para simbolizar la eliminación de 108 problemas (¡no sé por qué tienen tantos!). Todo esto se hace para asegurar que el Año Nuevo pueda comenzar sin todos los malos espíritus y preocupaciones, limpiado para un nuevo comienzo – supongo que no es muy diferente a nuestros propósitos de Año Nuevo.
También hacen pasteles de arroz decorativos llamados mochis, que parecen parecerse a varias formas de delicias turcas o a objetos parecidos a los macarrones, ¡cada uno de ellos con un aspecto más delicioso que el siguiente! 明けましておめでとうございます, ¡Japón!
Dinamarca
Nuestros hermosos amigos de Escandinavia tienen algunas tradiciones bastante extrañas en sus festividades. Sin embargo, la que me gustaría coronar como la más extraña es la tradición de mantener una pila de platos rotos frente a la puerta de la casa, algunos de los cuales son los propios y otros son colocados allí por amigos. La adición de los platos de los amigos da lugar a otro giro (quizás más extraño), ya que se dice que la persona que tiene más platos en la puerta de su casa es la que tiene más amigos o es la más popular (probablemente más preciso que Facebook). Se dice que esto simboliza la amistad y la hermandad.
Otra inusual tradición danesa consiste en saltar de los asientos de las sillas a medianoche en Nochevieja… No creo que esto simbolice nada. Supongo que a esas alturas de la noche no es necesario festejar para denotar un significado. Godt nytår, Dinamarca!
República de Irlanda
Según admito, Irlanda es un lugar muy divertido. Una vez la visité durante el fin de semana del Día de San Patricio, que coincidió con la victoria de Irlanda en el Seis Naciones, y todo salió a pedir de boca. Sin embargo, lejos de la diversión de Temple Bar, existen algunas de las tradiciones más tradicionales que he conocido.
Se dice que la forma en que sopla el viento en la medianoche de Año Nuevo puede predecir el futuro político del país. El viento que viene del oeste significa buena suerte, y el que viene del este significa que no hay buenas noticias; tradicionalmente significa que los británicos van a prevalecer. Una tradición quizás menos descabellada (aunque sólo marginalmente) que se dice que los irlandeses practican es aquella en la que las mujeres solteras colocan una ramita de muérdago bajo sus almohadas en Nochevieja, con la esperanza de que puedan conocer a sus futuros maridos en un sueño. Bliain nua fe mhaise dhuit, Irlanda!
Austria
Quizá la mejor celebración de Nochevieja sea la de nuestros amigos de Austria. Entre los festejos habituales y el esperado consumo de cerveza se encuentra una fiesta anual, antiguamente conocida como el Baile Imperial.
En el Palacio de Hofburg (antiguo palacio imperial) de Viena se celebra anualmente el Baile de Año Nuevo, en el que los celebrantes se visten con trajes blancos y chaquetas negras, luciendo adecuadamente en el más elegante de los escenarios. La velada se completa perfectamente con el Danubio Azul de Johann Strauss cuando el reloj marca la medianoche, y quizás aún más perfectamente con el cochinillo que se ofrece. Siguiendo con el tema del cerdo, pequeños cerdos confitados decoran las mesas, de forma similar a los que se comparten en Alemania en Navidad. Parece una ocasión encantadora. ¡Feliz Año Nuevo, Austria!
